Hasta el momento no existe tratamiento, por lo que se orienta fundamentalmente hacia un control sintomático individualizado según cada paciente.
Es importante mantener un adecuado nivel de actividad: caminar, nadar, gimnasia suave … dependiendo del estado de la enfermedad.
Son útiles algunos ansiolíticos y antidepresivos. Además se utilizan analgésicos para el dolor. También pueden ser útiles algunas terapias alternativas: masajes, acupuntura…